martes, 1 de enero de 2019

2018

Se acabó el 2018, es decir uno de los mejores años de mi vida.
Un año que me muestra dos seres humanos maravillosos, una grande, responsable, amorosa y entregada. Otro en crecimiento, siendo responsable de sí mismo, amable y dispuesto.

Se acaba un año con mi familia casi completa, con un hasta pronto que también significó un reencuentro de primos, un compartir familiar, un acompañarnos. Con la voz de mi madre siendo cordura y a su manera guía.

Con mis amigos completos, algunos molestos, algunos lejos, pero todos bien. Con grandes risas por todos los festejos y llantos por las pérdidas del año, con picardías por travesuras nuevas.

Termina con mis niñ@s a l@s que quiero profundamente y con otros agradecidos por lo que hemos alcanzado, con pacientes en evolución y dos trabajos abundantes, prósperos en donde estoy convencida de ser amada y mi dar mi cien.

Definitivamente fue un año feliz, que además, en los últimos días me plantea un nuevo reto para seguir en el 2019,  es un año que termino con un gracias y unas risotadas, que me hace estar segura de que el que viene será aún mejor.

Para mi hija

  Estoy pensando en ti, no corras hija, no corras por los demás, corre por ti, por tu carrera, por las cosas que te gustan, por la vida que ...