domingo, 26 de febrero de 2017

Caja de hilos

Te regalo una caja llena de hilos, donde haya un sin fin de colores,
te regalo el verde lleno de esperanza,
el azul de la calma eterna, necesaria para decidir,
te regalo el amarillo de la calidez brillante,
el naranja de la euforia y el rojo,
mi amado rojo de la pasión,
cósete con ellos un abrigo que te abrace cuando yo no esté,
ponle también café para cuando estés en esa calma que nadie arrebata.
Te dejé entre todos un hilo transparente que tomará el color de mi afecto
para recordártelo según lo que necesites,
si estás triste mi hilo transparente de amor será celeste para estar acorde a tu emoción,
si es alegría lo que te embarga, mi hilo será naranja y rojo para acompañarte,
mi hilo será también el que cosa a los otros hilos, el que los una,
tal como hace el amor con las cosas,
será tornasol cuando quieras solo verme o cuando pienses en mí.
Te dejo los hilos y el mío como muestra de mi eterno cariño y agradecimiento,
aunque no me veas siempre estaré contigo, sé que ya soy parte de ti...
Tal como tú eres parte de mí...
Por cierto, en la caja de hilos no hay tijeras, es que no hay que cortar las cosas,
solo integrarlas o aflojarlas, recuerda eso:
no se trata de cortar, se trata de integrar o aflojar...




Casa de dos

Estás aquí, me habitas, es mentira que te fuiste...
Has estado en mí cada vez que te he ignorado, cada vez que te he criticado,
cada vez que te he sancionado, cuando he negado mis afectos,
eres yo, somos una.
Por más que he intentado dejarte, debo decirte que hoy te veo
y te voy reconociendo en esa sensibilidad tan mía,
en ese no podernos ver al espejo porque no nos gusta,
porque no entendemos cómo funcionamos nosotras.
Te voy reconociendo en esta misma escritura que aparece a tu edad,
en ese deseo inmensurable del abrazo, de la espera por parte de alguien...
Te voy reconociendo en la relación con el otro,
en ese sentirte abandonada constantemente,
te veo en el negar las cosas que me ha traído hasta aquí,
en ese querer complacer y aguantar porque crees que es la manera...
También te veo en ese deseo de atención, de urgencia,
como si mañana se acabara el tiempo...
Te veo reflejada en las amigas que te abrazan,
en la dulzura... que ojos de inocencia, qué posibilidad de creer!!!
Que empática y creativa que eres.
Te acompaño en tu llanto, estoy aquí...

Para mi hija

  Estoy pensando en ti, no corras hija, no corras por los demás, corre por ti, por tu carrera, por las cosas que te gustan, por la vida que ...